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La huelga de estudiantes en Madrid estuvo
marcada por la tremenda represión policial, contando con más de 50 compañeros
detenidos en la UCM, que fueron liberados la misma noche de su detención. En la
URJC vivimos un auténtico estado policial.
La noche del 25 al 26, 60 alumnos de la URJC
se encerraron en el aulario del campus de Vicálvaro para protestar contra el
cierre de grados y la ley mordaza. En el encierro reinó, en todo momento, la
tranquilidad, sólo interrumpida cuando, alrededor de las 12 de la noche,
aparecían dentro de la universidad unos 25 agentes del CNP, acompañados de todo
el personal de seguridad de la URJC, identificando a los presentes y tratando
de desalojar el aulario. Con el ejemplar comportamiento del alumnado de la
URJC, conseguimos continuar el encierro. La burguesía enseña las garras,
tratando de amedrentar a los estudiantes organizados; nada más lejos de la
realidad. La presencia policial se mantuvo en los alrededores del campus
durante toda la huelga.
Las dos jornadas de huelga tuvieron un enorme
seguimiento en la URJC, en la que se mostró un claro avance con respecto a la
última huelga el pasado 24 de octubre, con un notable crecimiento de la
organización y aumento de la combatividad, además de un mayor número de
estudiantes de la URJC en el piquete. Un pequeño ejemplo de cómo la
organización en la base, en una estructura de clase, marca la diferencia entre
el espontaneísmo y la lucha organizada, como contraposición al modelo sindical
oportunista, cada vez más alejado de las masas, que propone el Sindicato de
Estudiantes (que brilló por su ausencia en todo el desarrollo de la huelga).
Si bien la presencia policial fue continua,
llegando a haber hasta 6 furgones de la UIP en la entrada de la universidad,
incluso desplegándose en los alrededores esperando la señal para entrar y
cargar contra los estudiantes, la represión no fue únicamente policial. La
burguesía también reprime mediante la alienación, sufriendo algunos compañeros
del piquete amenazas en varias ocasiones por parte de ciertos elementos de
ideología liberal, en un intento de desestabilizar el piquete. De nuevo un
comportamiento ejemplar de los presentes, que supieron reaccionar con templanza
ante sus amenazas.
Denunciamos, además, las mentiras y
difamaciones vertidas sobre el piquete informativo de la URJC por los
principales voceros del capital, y desmentimos que se utilizaran barricadas
incendiarias, ni que se ejerciera la violencia por parte del piquete en ningún
momento. La única violencia fue aplicada por la agresividad policial y por las
amenazas del esquirolaje más reaccionario.
La lección que debemos sacar de esta huelga
es que sólo con la verdadera organización, podremos conseguir que la educación
deje de servir a los monopolios, deje de servir a la burguesía, para tumbar el
sistema capitalista explotador y asesino y construir al fin una sociedad
socialista en la que la educación sirva, única y exclusivamente, a la clase
obrera y el pueblo. Por ello, no nos cansaremos de decir que lo que necesita el
estudiantado de extracción obrera y popular es un sindicato estudiantil estatal
de clase y combativo.
COMPAÑERO, COMPAÑERA, ORGANÍZATE, ¡SOLO LA
LUCHA TE DA FUTURO!
LA HUELGA FUE UN GOLPE, NOS QUEDA TODO EL
COMBATE
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